Tabla de calores especificos para diferentes sustancias
Su bajo calor específico facilita el enfriamiento rápido. Las tablas suelen proporcionar valores para el aire seco a presión atmosférica estándar. El acero, una aleación de hierro y carbono, tiene un calor específico que varía según su composición.
Los metales, en contraste, suelen tener calores específicos bajos, facilitando su calentamiento rápido. La conversión entre estas unidades es sencilla, pero es importante mantener la consistencia al realizar cálculos. Entender estos datos permite predecir el comportamiento térmico de los materiales.
El nitrógeno, un gas inerte, tiene un calor específico relativamente bajo, similar al del aire. La madera, un material orgánico, tiene un calor específico que varía según su tipo y humedad. El vidrio común tiene un calor específico moderado, similar al de algunos metales.
Su calor específico varía ligeramente con la humedad y la presión. Así, su conocimiento facilita el diseño eficiente de sistemas térmicos. El aluminio, un metal ampliamente utilizado, tiene un calor específico moderado. Se utiliza en cableado eléctrico y en sistemas de refrigeración.
La tabla de calores específicos agrupa estos valores para diferentes sustancias comunes y compuestos. Esta diferencia puede ser importante en aplicaciones de alta temperatura. El calor específico se mide generalmente en Joules por gramo por grado Celsius (J/g°C) o en calorías por gramo por grado Celsius (cal/g°C).
El acero inoxidable tiene un calor específico ligeramente mayor que el acero al carbono. Esto significa que se calienta y enfría más rápidamente.
Es el gas con el punto de ebullición más bajo y se utiliza en aplicaciones de refrigeración a muy bajas temperaturas. La tabla lo destaca por su singularidad. Su bajo calor específico permite una transferencia de calor eficiente a bajas temperaturas. Se calienta rápidamente y es un excelente conductor de calor.
El cobre, otro metal común, tiene un calor específico bajo. El alcohol etílico, presente en muchos desinfectantes, tiene un calor específico considerablemente menor que el agua.